jueves, 23 de febrero de 2012

Carreras de neutrinos.

Dice la zarzuela famosa ('La verbena de la paloma', me parece) que hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad (hablo de memoria y no la tengo muy bien). Y es verdad. Hasta el punto de hacer carreras de neutrinos, que son tan pequeños que no se ven, pero estar, están ahí.
Primero fueron noticia por haber superado la velocidad de la luz (casi 300.000 metros por segundo) y ahora porque un cable estaba mal en el aparato y hay que repetir el experimento.
Yo no voy a ser de los que digan que menos experimentos y más realidad, porque creo que las ciencias son de lo poco que adelanta algo (tampoco tanto), otra cosa es que esos adelantos se apliquen al sufrimiento humano como debiera por intereses espurios (¡bonito palabro!) y tal y cual.
De momento, que las carreras de neutrinos compitan con la recesión y los recortes no me parece lo peor. Lo peor es que siempre ganen los tiburones en esta ruleta macabra que nos imponen, nos guste jugar o no, cuando habría que aplicarles la guillotina.
Yo apostaría por una neutrino monísima que promete mucho y lleva el germen de la vacuna contra la malaria. También hay neutrinos que harían justicia de la buena si les dejaran las grandes corporaciones o algún proxeneta ex del FMI que sigue 'coleando' demasiado.
En fin, a ver qué pasa y si dejan mal al genio Einstein, que ya va haciendo falta algún otro genio de recambio porque ha dado ya mucho 'juego'.
Javier Auserd.

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